Laminado, parquet y Co.

Resistente, seguro y exigente en el procesamiento

A la hora de renovar o construir, los revestimientos del suelo son la base de la sensación de vida y de habitación deseada al diseñar la estancia. Según el material y el color, cada habitación tiene un aspecto diferente. Pero hoy en día no es sólo el aspecto lo que determina la elección del suelo. La higiene, la resistencia y los requisitos individuales de uso de la habitación desempeñan un papel cada vez más importante en la elección del revestimiento del suelo. Pero la facilidad de instalación y la calidad también son aspectos que cada vez cobran más importancia a la hora de elegir el suelo adecuado para los consumidores finales.


Tan diversos como las exigencias del producto final son los retos para los productores de suelos en la transformación industrial de los materiales básicos necesarios para ello, como la madera, los plásticos o los materiales compuestos.


Procesamiento de suelos laminados, LVT, SPC y parquet

Suelo laminado se compone de varios materiales (HDF, MDF, papel decorativo y la correspondiente capa protectora de resina de melamina), que se unen en capas mediante prensado en caliente. El laminado se fabrica básicamente en tableros de gran formato, que luego se procesan en consecuencia. Aunque el laminado tiene propiedades de uso similares a las de la madera maciza, el procesamiento de este material en capas es completamente diferente y no menos exigente.

Suelos de vinilo, también conocidos como SPC, WPC o LVT, son materiales para suelos que consisten principalmente en una gruesa capa de plástico y el correspondiente material decorativo impreso. El material de base suele producirse en placas de gran formato, que se someten a su procesamiento final en otras etapas. Debido a su gran flexibilidad y extrema resistencia, se utilizan principalmente en pabellones deportivos, baños o en zonas de casas o garajes. Debido al alto contenido de plástico, estos suelos son extremadamente resistentes, sin embargo, es precisamente esta propiedad del material la que trae consigo sus características especiales en la producción.

Los suelos de planchas están completamente cortados de una pieza de madera maciza y se componen exclusivamente de una madera, normalmente de muy alta calidad y especialmente tratada. Suelos de parquet se componen de paneles de madera maciza o de chapa de madera fina pegada a una capa de soporte de otro tipo de madera. Ambos tipos de suelos de madera maciza tienen sus propias propiedades especiales y son, sobre todo, muy resistentes y pueden utilizarse durante mucho tiempo. Los suelos de parquet o de tablas requieren juntas machihembradas para su instalación y, por tanto, se colocan como suelo flotante o se pegan firmemente al suelo.


Atención al Cliente
Ventas
+34 (0) 937 507 925
Narcís Monturiol, 11-13
08339 Vilassar de Dalt (Barcelona)
España
Recomendar esta página